Capítulo 2286
Todavía era incapaz de enfrentarse a alguien tan poderoso.
Sin embargo, esperaba con ansias la segunda providencia que aparecería en la Tierra.
La Primera Calamidad fue un desastre natural. Después de que apareció la primera providencia, James obtuvo las 108 Estelas de Inifidad.
¿Cuál sería la Segunda Calamidad y la segunda providencia?
James estaba anticipando un poco la Segunda Calamidad pero también estaba preocupado por eso.
También esperaba que la Segunda Calamidad no sucediera tan pronto, sino que esperara hasta que regresara a la Tierra.
Tendría una fuerza sin igual para cuando regresara a la Tierra y podría competir con los cultivadores de los Tres Mil Mundos por la segunda providencia.
En ese momento, muchos pensamientos cruzaron por su mente.
“Suspiro.”
James respiró hondo y guardó sus pensamientos confusos.
Henry preguntó: “¿Viniste a la Morada Celestial para cultivar?”
James asintió y respondió: “Sí. Un torneo está ocurriendo en el Reino Antiguo en tres meses. Es un gran evento para los jóvenes prodigios. Si clasifico entre los diez primeros, puedo ingresar al Abismo del Dragón y ser bautizado por los poderes de la Edad Primordial. Es una gran oportunidad para mejorar mi fuerza, así que no quiero perderla”.
Se volvió hacia Delainey y Henry y les dijo: “También será una oportunidad para ustedes dos. Vuelvan a entrenar y mejoren ustedes mismos durante los próximos tres meses.
“Según lo que aprendí, aquellos que alcanzaron el Ocho Escalón de la Ascensión Inmortal ciertamente estarían entre los diez primeros del Gran Torneo”.
Al escuchar esto, Henry dijo emocionado: “¡Aún quedan tres meses más! Dentro de la Cámara del Tiempo, tendremos mucho más tiempo. Seguramente alcanzaré el Ocho Escalón de la Ascensión Inmortal durante este período. Me he quedado en la Morada Celestial el tiempo suficiente y he querido salir por algún tiempo”.
Delainey sonrió y dijo: “También tendré que cultivarme mucho”.
“Bueno, basta de hablar. Regresemos a la Cámara del Tiempo.”
Después de que James tuvo una breve conversación con ellos, se giró para irse.
Aunque era el dueño de la Morada Celestial, desconocía muchas de sus funciones. Ni siquiera podía entrar en la Cámara del Tiempo sin la ayuda de Sophie.
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