Las lágrimas corrían por el rostro de Estella mientras sollozaba: “Sra. ¡Jarvis, por favor perdona a papá!”. Los ojos de Roxanne parpadearon.
Acababa de prometer mantenerse al margen de los asuntos de Estella, pero las lágrimas de la niña casi la hicieron faltar a su palabra. Después de una breve vacilación, extendió la mano para secar las lágrimas de Estella.
“Essie, no llores. Yo…” Roxanne había querido explicar que no estaba enojada con Lucian, pero después de recordar lo que había dicho antes, no se atrevió a decirlo en voz alta.
Cuando empezó a hablar, Lucian levantó una ceja y pareció ansioso por escuchar sus palabras. Sin embargo, dejó su oración sin terminar incluso después de que él esperó un rato.
El rostro de Lucian se volvió tan oscuro como un trueno, mientras que los gritos de Estella se hicieron más fuertes.
Roxanne abrió la boca sin pronunciar palabra. Sintió pena por Estella y miró a Lucian, indicándole que consolara a Estella.
En el momento en que lo hizo, vio la furia ardiente en sus ojos.
Cuando sus ojos se encontraron, Roxanne sintió que su corazón dio un vuelco.
“Eso es todo. Essie, ven. Vamos a casa.”
Lucian miró hacia otro lado y se inclinó para tomar la mano de Estella.
Estella ya estaba nerviosa por su pelea. Al escuchar el tono de su padre, supo que su desacuerdo se había intensificado.
Ella comenzó a llorar a todo pulmón.
Archie y Benny subieron las escaleras a toda prisa. “¿Qué pasa, Essie?”
Los niveles de estrés de Roxanne ya habían sido llevados al límite por Lucian y Estella. La llegada de los chicos era lo último que necesitaba.
Cerró los ojos y se frotó las sienes, tratando de mantener la calma mientras hablaba en voz baja. “No es nada. Ustedes esperen abajo.
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The readers' comments on the novel: El secreto que nos separa
Cómo sigue ahora la novela. Me he quedado enganchada...