Capítulo 611
Lysa volvió después de devolver las flores. Dudó en decirle algo a Roxanne, que estaba estudiando información en su computadora portátil en el sofá.
Roxanne se dio la vuelta cuando escuchó algunos ruidos cerca de la puerta. Al ver a Lysa, preguntó: “¿Has devuelto las flores?”
El ama de llaves asintió levemente y respondió: “Le pedí a alguien de la floristería que me lo devolviera”.
Satisfecha, Roxanne volvió a concentrarse en su trabajo sin pronunciar palabra.
Aunque Colby había estado a cargo de todos los asuntos relacionados con el instituto de investigación, aún necesitaba a Roxanne para discutir una posible colaboración con la familia Damaris.
Roxanne también trató el asunto con seriedad. De hecho, durante su recuperación en casa, había dedicado la mayor parte de su atención al proyecto del instituto de investigación.
Afortunadamente, Jack sabía sobre su lesión y no aceleró su progreso. En cambio, le permitió trabajar a un ritmo cómodo.
Su consideración llenó a Roxanne de cierta medida de culpa. Estaba decidida a desarrollar una comprensión profunda del proyecto para poder retomar las cosas más rápidamente una vez que regresara al trabajo.
Mientras estudiaba la información del proyecto con gran atención, la voz de Lysa sonó de repente. “Milisegundo. Jarvis, ¿no crees que estás siendo un poco… insensible?
Enviar flores de regreso fue sin duda una muestra de humillación hacia cualquier donante de regalos, y mucho menos hacia alguien tan venerado como Lucian.
Además, el último recordatorio de Lucian esa mañana conmovió a Lysa, quien estaba cada vez más convencida de que los sentimientos de Lucian hacia Roxanne eran sinceros.
- La pregunta de su ama de llaves hizo que Roxanne frunciera el ceño. Desgarrando su mirada
desde la pantalla de la computadora portátil, ella respondió con frialdad: “Nunca pasará nada entre nosotros, así que devolverle las flores es lo único natural que se puede hacer”.
Al darse cuenta de la intención de Lysa de refutarla, Roxanne esbozó una sonrisa y agregó: “No te preocupes por esto. Nunca aceptaré nada de él, y eso es definitivo”.
Después de eso, Roxanne se giró para mirar la pantalla de su computadora portátil, sus dedos volaban rápidamente sobre el teclado. Era una señal innegable de que ya no deseaba discutir el tema del afecto de Lucian.
Comments
The readers' comments on the novel: El secreto que nos separa
Cómo sigue ahora la novela. Me he quedado enganchada...