Capítulo 385
Fernando los regañó con dureza. Nadie se atrevió a decir una palabra.
Todos contuvieron la respiración por temor a enfurecer al Sr. Santander y los despidieron.
“Señor Santander, lamento la farsa de hoy. Hay un malentendido en la rueda de prensa“. Javier explicó con cautela.
Fernando no quería responderle, pero tenía que ser justo. “Quería preguntarle a la Sra. Bracamonte“.
Los diseñadores se sintieron aliviados al escuchar eso.
Tenian miedo de ser regañados por él.
Después de todo, fue culpa de Amber y no le hicieron nada a Sabrina.
Sin embargo, Amber temia que Sabrina se quejara con Fernando por esto. Ella pensó: “El señor Santander sería profesional. Pero si confía en Sabrina, ¿la despedirán?“.
Por lo tanto, camino hacia Fernando y quería demandar a Sabrina primero. Antes de que pudiera hablar, Fernando abrió la boca. “Sra. Melton, he escuchado la conversación entre usted y la Sra. Bracamonte. Si no fue un accidente o una calumnia, ¿no cree que deberia disculparse con ella?”
Amber entró en pánico y parecia molesta.
Miró a Fernando con incredulidad de que el Sr. Santander la dejara disculparse con Sabrina frente a tanta gente.
“Si no te disculpas, no puedo dejar que te quedes en el Alta Costura JK“, dijo Fernando sin rodeos.
Ámbar estaba aterrorizada. Aún no había recibido la oferta de EU Designs. Si la despidieran repentinamente, EU Designs la, reconsideraría. No se atrevió a correr el riesgo y miró a Fernando con sentimientos encontrados.
Después de varios momentos de lucha interna aparentemente dolorosa, se disculpó con Sabrina: “Sra. Bracamonte, lamento el comportamiento de hoy.
“¿Podrías por favor perdonarme?”
Amber se inclinó ante Sabrina cuando otros diseñadores la miraban.
Se sentía humillada pero no tenía otra solución.
Ella solo podía disculparse.
Sabrina no aceptó su disculpa. No era la primera vez que lo hacía por travesura. Ella no se suavizó y dijo: “No te lo perdonaré. Me había afectado negativamente y no podía resolverse con una simple disculpa. Necesito que lo aclares en linea“.
Sabrina dijo sin ser servil o engreida.
Fernando de alguna manera comenzó a apreciarla.
Su chica no era una presa fácil.
“Sra. Bracamonte…” Amber dudó porque no quería avergonzarse. Odiaba más a Sabrina pero no se atrevia a mostrar su odio,
Sabrina continuó; “¿No quieres hacer eso? Entonces no te perdonare“.
Fernando se hizo eco de sus palabras: “Estoy de acuerdo con la Sra. McMillan. Podria ser un ejemplo en Alta Costura JK. Si algo así vuelve a suceder en el futuro, no sería blando“.
“Si la Sra. Melton no está de acuerdo con esta solución, no necesita asistir al espectáculo mañana“.
Amber ya no podía calmarse. Ella se apresuró a asentir: “Señor Santander, puedo aclarar“.
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