Capítulo 780
Sabrina no esperaba que Fernando la besara. Se sonrojó y golpeó a Fernando de inmediato. “Detente. Jase estará aquí pronto“.
Sabrina le había dicho a Jase que viniera temprano para discutir algo sobre el Grupo Santander.
“¿Y qué? ¿Jase se negará a escucharme?” A Fernando no le importó su condición y siguió besando a Sabrina. “Te lo digo. No puedes alejarte de mí“.
“Averiguaré qué pasó. De todos modos, no puedo creer que me acosté con Ansley“.
Al escuchar eso, Sabrina se quedó atónita.
¿Cómo podría saberlo Fernando?
Después de todo, no podía recordar lo que pasó anoche.
“Está bien, está bien. Dejo de burlarme de ti. Deja de besarme. No puedo respirar ahora“. Sabrina tenía dificultad para respirar y tuvo que decirle la verdad.
“¿Qué quieres decir?” Al escuchar eso, Fernando dejó ir a Sabrina y la miró confundido.
“No pasó nada entre tú y Ansley. Solo quería irritárte“. Con esto, Sabrina tomó la mano de Fernando para comprobar si sangraba.
Ella bajó su mano después de comprobarlo.
Fernando estaba irritado con Sabrina, mientras que él no podía hacerle nada. Él dijo: “Lo dejaré pasar, porque estás embarazada. De lo contrario, te haré saber que puedes quedarte
Sabrina sabía a qué se refería. Se sonrojó y comenzó a golpear a Fernando. “Eres tan malo.”
Más tarde, Sabrina dijo con seriedad: “Puedo lidiar con Ansley“.
“¿Puedes?” preguntó Fernando, frotándose las sienes.
Sabrina asintió y dijo con una sonrisa: “Sí, puedo hacer eso. Soy tu esposa. Si no hago algo, más mujeres intentarán seducirte“.
Fernando entendió. “Está bien, me quedaré fuera de esto“.
“Dejaré que Ansley admita abiertamente que es una rompehogares. Después de eso, ya no mantendré a Ansley en la compañía“. Sabrina continuó: “¿Sabes qué tipo de drogas usó contigo?“.
Fernando sugirió: “¿Es el filtro?”
Sabrina negó con la cabeza. “Alucinógeno, las últimas sustancias no aprobadas. Es por eso que estabas atontado anoche.
“Si no le damos una lección, más mujeres intentarán tenderte una trampa“.
“Ya veo. Estoy de tu lado“. Fernando tampoco quería mantener a Ansley en la empresa.
Es más, Ansley no tendría sitio en Trujillo.
“Puedes tomar un baño ahora. Dormiste profundamente anoche sin bañarte“. Sabrina instó a Fernando a bañarse.
Fernando vislumbró a Sabrina y tomó la mano de Sabrina. “Cariño, ¿qué tal si me bañas?”
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