Capítulo 1216
Fernando volvió al coche. Sabrina lo abrazó con miedo y le dijo: “Fernando, ¿estás bien? ¿Quién es ese hombre?”
“Relájate. Lo envía Alfred, que está buscando a su hija“. Fernando se frotó la frente y la tranquilizó.
“¿Por qué cree que le estás ocultando a su hija?” Sabrina se preguntó cómo llegó Alfred a donde estaba.
Los ojos de Fernando se oscurecieron. “Alguien está tratando de tenderme una trampa. Alfred sospecha de mí, pero no tiene ninguna evidencia. No te preocupes. No puede hacerme daño. Me acecha para ver si me comunico con su hija“.
Sabrina asintió y se apoyó en sus brazos. “De todos modos, tienes que tener mucho cuidado“.
“Está bien. No te preocupes“.
Fue una larga noche.
El viento marino de Neisetal levantó las olas y lavó suavemente el borde de la ciudad costera.
Estaba brillante en la sala de estar de una lujosa mansión escondida en una tierra que pertenecía a una antigua familia noble.
Una chica bonita estaba sentada en el sofá, completamente despierta, frente a Stephen.
-Era Lilian, quien había estado encerrada por él durante casi dos días.
Estaba a punto de explotar si él no la dejaba ir.
“Stephen, ¿has llamado a mi papá para pedir el rescate?” Lilian levantó su hermoso rostro y miró fríamente al apuesto hombre que tenía delante.
“Relájate. ¿No quieres huir de la boda?” Stephen puso una mano en su bolsillo con una mirada indiferente en su rostro.
No parecía importarle el rescate.
“Stephen, déjame decirlo de nuevo, no tiene nada que ver contigo. Te aconsejo que llames a mi papá para pedir el rescate. Quiero salir de este lugar“. Lilian estaba harta del encierro.
Era mimada y obstinada.
La estaba matando permanecer en el mismo lugar durante tantos días.
Stephen apretó los labios con ojos sombríos. “Señorita Lilian, pensé que era inteligente“.
“¿Qué quieres decir?” Liliana se enojó.
“Querías huir de la boda. ¿Por qué quieres volver después de que te ayudé?” dijo Stephen a la ligera. Había un rastro de frialdad en su tono como si no le importara en absoluto.
Lilian se levantó enojada del sofá y dijo: “Está bien. Te reto a que llames a mi papá ahora. Por cierto, no necesito tu ayuda“.
Esteban se burló. “Estás seguro
de
que vas a volver?”
Lilian frunció el ceño y dijo con resentimiento: “Sí. Llama a mi papá ahora“.
Prefiere que su papá la atrape que quedarse con Stephen.
Podría pensar en una forma de escapar de su padre más tarde.
Ella despreciaba a Stephen.
Estaba furiosa porque la había secuestrado, así que no quería quedarse con él ni un segundo más.
“Está bien. Espero que no te arrepientas“, dijo Stephen con frialdad mientras tomaba su mano.
Tiró de ella con tanta fuerza que casi se cac.
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