Camila sonrió con desdén: –doña Sara, usted realmente se tiene en alta estima, el jefe Alberto y Raquelita están aquí, y aún así dice que ustedes podrán salir indemnes.
Laura dijo: Doña Sara, antes ustedes consideraban al jefe Alberto como su mayor apoyo, ahora que no tienen ese apoyo, jaún se atreven a ser arrogantes!
Doña Sara sonrió con desdén: Si no me creen, vengan!
Raquel observaba a estas personas de la familia Pérez, una leve perturbación emergió en sus fríos ojos y cejas, conocía demasiado bien a la gente de la familia Pérez, ahora doña Sara parecía haber encontrado nuevamente un respaldo.
Alberto observó a la gente y, con un gesto de su mano, ordenó: -¡Captúrenlos a todos!
Los guardaespaldas vestidos de negro de Alberto se adelantaron inmediatamente, intentando capturar a doña Sara.
Doña Sara miró ansiosamente hacia Alejandro: Alejandro, ¿el gran personaje aún no hà llegado?
¿Gran personaje?
Los ojos de Raquel se movieron ligeramente, ¿acaso el gran personaje que venía del Valle del Río era un respaldo solicitado por la familia Pérez?
Alejandro echó un vistazo a su reloj de pulsera: el gran personaje debería estar llegando
pronto.
María miró a Raquel y sonrió: -Raquel, tu plan es meticuloso, pero seguro no contaste con que todavía tenemos el mayor respaldo.
Raquel preguntó: -¿Qué respaldo?
María no habló, en ese momento, una tras otra, limusinas de clase mundial aceleraron y se detuvieron lentamente.
Hoy había una lluvia fina y brumosa, muchos guardaespaldas vestidos de negro bajaron de los autos y se colocaron respetuosamente a ambos lados, luego un mayordomo sosteniendo un paraguas negro se paró afuera del auto, diciendo respetuosamente: -Señor, hemos llegado, es aquí.
La puerta trasera del carro se abrió, y una figura imponente y firme entró en la vista.
Era un hombre de mediana edad, vestido con un abrigo negro hecho a medida, tenía un rostro apuesto, con rasgos profundos y atractivos, el tiempo había depositado en él una atmósfera profunda e insondable, su porte era tan noble como el de un emperador.
Alberto miró al hombre y murmuró en voz baja: ¿Víctor?
Capitulo 532
Luis también dio un paso adelante, acercándose a Raquel, y dijo en voz baja sorprendido: Resulta que es la persona más rica del mundo, el gran personaje de Valle del Río, Víctor, no es de extrañar que hoy el aeropuerto y las carreteras estuvieran bloqueadas, ¿cómo es que este gran personaje ha venido a Solarena?
Raquel clavó su mirada clara en Víctor, había oído hablar de este personaje legendario antes, pero hoy era la primera vez que se encontraban cara a cara.
Víctor había desaparecido de la vista del público hace muchos años, convirtiéndose en una presencia misteriosa que ni las revistas de entretenimiento ni los medios de comunicación podían capturar.
¿Cómo había llegado de repente a Solarena?
Su mayordomo sostenía un paraguas negro mientras Víctor, con paso firme, se acercaba lentamente hacia el grupo.
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