Libro 2❘ La vida fabulosa de Jay Capítulo: 15
Jay
Terminé con el cabello de Laura y, por supuesto, ella me elogió como siempre lo hace. Me
volví hacia ella y le pregunté:
-¿Está segura de que no quiere ir a almorzar con su hijo?
-Estoy segura. Realmente no puedo con el sushi ahora mismo y sé que a él le encanta. Solo ve y hazle compañía, por favor. Ya conoces a todos los demás en mi familia, así que también
podrías conocer a Evan -dijo Laura.
Me volví hacia donde estaba sentado Evan y le dije:
-Dame como diez minutos, y nos iremos a ese lugar de sushi, ¿ok? -le dije.
-Tómate tu tiempo -dijo Evan mirando su teléfono.
Limpié mi estación, y vi a Laura hablando con Evan. Me acerqué a Andrea y le dije:
-Voy a salir a almorzar y puede que no regrese. ¿Está bien si cierras este lugar si no vuelvo?
Andrea miró a Evan y luego de nuevo a mí y dijo:
-¿Estás seguro de que solo vas a almorzar?
-¡Andrea! ¡Es el hijo de Laura! -dije riendo.
-Bueno, sabes cómo encender ese encanto, es un guapo -expresó Andrea riendo.
-Andrea, siempre intentas emparejarme con todos los lindos -le dije.
Andrea se inclinó hacia mí y dijo:
-Guardaré tu secreto jefe, los vi a ustedes dos en el bar hace unas semanas.
-Estás bromeando, ¿verdad? -dije mirándola y luego de nuevo a Evan. Me incliné para susurrar asegurándome de que nadie pudiera escucharnos-. Él aún no ha salido del clóset. Así que por favor no digas nada.
-No lo haré, pero tampoco quiero que pienses que ustedes dos tienen que andar a escondidas. Si necesitas ayuda, te apoyo, ¿ok? -me dijo Andrea.
Asentí con la cabeza y me volví hacia Evan.
-Ok, estoy listo para disfrutar mi sushi. Te digo ahora, voy a hacer un sake bomb.
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Libro 21 La vida fabulosa de Jay…
-¡Genial! Espero que ustedes dos se lleven bien, me encantaría que mis cinco hijos se
llevaran bien. -Ella rio mientras se levantaba.
-¿Cinco hijos? Sé que Kevin es el cuarto hijo honorario, pero ¿Jay es el quinto? -preguntó
Evan, confundido.
-Por supuesto, también tienes una tía honoraria llamada Mitzi. Ella dijo que es demasiado mayor para ser mi hija y que tenemos exactamente la misma edad de 28. -Laura rio.
-Supongo que a mi mamá le gusta coleccionar personas -dijo Evan volviéndose hacia mí.
-Me gusta ser parte de la colección de tu mamá -respondí encogiéndome de hombros.
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Evan
Quería decirle que me alegraba que Jay fuera parte de la colección de mi mamá, pero me
acobardé. Mi mamá adora a Jay, eso es obvio.
-¿Quieres ir en mi coche? -le pregunté.
-Claro, te dejaré ser mi chofer —dijo Jay.
-Pórtense bien -dijo mi mamá mientras se despedía de nosotros.
Salimos hacia mi coche y me subí. Jay rodeó hasta el asiento del pasajero y se subió.
-Si alguna vez salimos en una cita de verdad, espero que me abras la puerta -dijo Jay.
-En serio, ¿los hombres gays hacen eso el uno por el otro? -le pregunté.
-¡Eh, sí! Se trata de respeto. Sé que esto no es una cita de verdad, pero si llegamos a hacerlo,
solo te lo digo de antemano -dijo Jay.
-Te estás poniendo un poco quisquilloso de repente. ¿Por qué? -dije mirándolo.
-Oh, no lo sé. Supongo que es porque solo soy parte de una colección -dijo Jay.
Me di cuenta de que estaba molesto porque me referí a que mi mamá colecciona personas.
-Lamento haber dicho eso. No eres parte de una colección, eres un hombre hermoso que es
amable y cariñoso. Tengo suerte de que me permitas pasar tiempo contigo. -Suspiré.
-Un poco exagerado, Evan, pero lo tomaré. Mira, desearía que fueras más abierto, ¿ok? Sé que pones una fachada. Dios, por eso odio salir con chicos que no han salido del armario
expresó él, hundiéndose en el asiento.
Extendí la mano y tomé la suya.
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Libro 2| La vida fabulosa de Jay…
-Jay, sé que estoy poniendo este estrés en tu vida. Lo siento por eso. No quiero molestarte.
-Sé que no lo haces a propósito. Es solo que esto es una mierda, ¿vale? Primero un ex mío regresa y ahora tengo que fingir que tú y yo acabamos de conocernos y somos amigos. Es
mucho, Evan -dice.
-¿Qué puedo hacer para que te sientas mejor ahora mismo? ¿Ayudarte a desestresarte? -le
pregunté.
—Una mamada estaría bien. -Jay se rio. Lo miré-. Solo estoy bromeando, pero dame el Sake
Bomb, y estaré bien -agregó.
Cerré los ojos y no voy a mentirme a mí mismo, quiero a Jay.
-¿Tu lugar es privado? Podemos ir allí si quieres -dije.
-¿Para sake bombs? -preguntó Jay.
-Tal vez, pero ahora mismo, realmente quiero darte esa mamada. Quiero sentir tu polla en mi
boca. ¿Qué dices? -le pregunté.
Libro 21 La Vida Fabulosa de Jay Capítulo: 16
Jay
Espera, ¿Evan acaba de aceptar darme sexo oral? ¿Estamos en ese punto de nuestra relación?
Acaba de insultarme frente a su mamá. Admito que no creo que haya querido hacerlo, pero,
aun así.
que no es justo para ti.
-Dijiste Disney, yo no puedo ir a Disney–dijo.
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